Todo ello acompañado de un motor de gran rendimiento, con un consumo muy contenido, y con un equipamiento de primer nivel, lo que convierte al modelo de Ford en una opción muy seria para viajar de manera cómoda, sin que el paso de los kilómetros se noten en demasía.

Calidad contrastada

A nivel externo, la Connect sobresale por su rompedor diseño, muy del estilo de la nueva generación de los vehículos de Ford, con un frontal muy expresivo y una línea lateral ascendente que le otorgan en su conjunto una personalidad propia muy llamativa. También su color “amarillo solar” (todo hay que decirlo) contribuye a darle ese sello distintivo que le caracteriza.

En el interior el trabajo que se ha hecho resulta magnífico. Por lo pronto, se han tomado algunas de las líneas maestras del que se pueden ver en algunos turismos de la marca, sobre todo en lo que se refiere a la delineación del salpicadero o al diseño del volante y mandos de la climatización.

Pero lo mejor del habitáculo de la Tourneo Connect son las soluciones que presenta para conformar un espacio lo más confortable posible. Por lo pronto, existen numerosos huecos y guanteras repartidos por el panel frontal, puertas y por encima del parabrisas.

Y todo con una terminación y un ajuste de todos los materiales más que notable cuyo resultado es una sensación de calidad muy alta. A ello hay que sumarle una gran luminosidad merced al techo panorámico que incorpora.

En esta ocasión, contábamos entre manos con la variante de carrocería larga de 3,06 metros de batalla para 4,81 metros de longitud (la versión corta llega a los 2,66 metros de distancia entre ejes y una longitud de 4,41 metros).

Además, el vehículo disponía de una tercera fila de asientos escamoteable, con lo que la Gran Tourneo Connet puede dar cabida a siete pasajeros en conformación 2+3+2. Como viene siendo habitual en estos casos, los dos asientos traseros no presentan una amplitud excepcional, pero sí que suficiente en este caso para dar cabida a dos adultos sin que éstos tengan que ir con las piernas muy encogidas. Es más, de todos los vehículos de similares características que hemos tenido ocasión de probar, el modelo de Ford es que mayor espacio presenta en la parte posterior. Eso sí, desplegar la tercera fila cuesta un poco al principio, pero una vez cogido el truco se realiza en pocos segundos.

Lo mejor de todo ello es que la banqueta central, de gran amplitud (la clave está en la distancia entre ejes de más de tres metros) también se puede partir en dos (2/3-1/3) dando lugar, junto con la fila posterior, a hasta 16 configuraciones diferentes dependiendo de la necesidad de cada momento.

Luego, el maletero también presenta un gran espacio. Así, con las siete plazas en orden de marcha, la longitud del maletero llega a los 450 centímetros, siendo la capacidad del equipaje de 322 litros. Por su parte, si únicamente utilizamos las dos primeras filas, la longitud de carga es de 1,26 metros, con un volumen de 1.286 litros, mientras que en caso de plegar la banqueta central el espacio libre alcanza los 2,17 metros para 2.620 litros de capacidad.

Si a nivel de confort y soluciones interiores la Gran Tourneo Connect se sale de la norma, por lo que respecta a la tecnología también destaca sobremanera, tanto desde el punto de vista de los dispositivos de seguridad que incluye como de ayuda a la conducción. En este sentido, y además de los elementos ya inherentes en cualquier vehículo moderno que se precie (ver cuadro de equipamiento), se beneficia de una solución como el Auto City Stop, que frena el vehículo en lugar del conductor ante un peligro inminente de colisión a baja velocidad (menos de 30 km/h), o del Ford SYNC, que permite manejar equipos como el de sonido o el teléfono sólo con la voz.

Gran rendimiento

Desde el punto de vista mecánico, el modelo de Ford de nuestra prueba escondía bajo el capó el motor diesel Duratorq 1.6 TDCi de 115 CV de potencia y 270 Nm de par, el cual asociaba una caja de cambio manual de 6 relaciones.

Señalar que el modelo de Ford también están disponibles otros dos propulsores diesel de 75 y 95 CV, y dos más de gasolina de 100 y 150 CV.

En líneas generales, la mecánica que teníamos entre manos nos sorprendió por su excelente puesta en escena, pues a las poco más de 1.700 vueltas ya muestra todo su potencial, lo que nos permite ir ganando agilidad rápidamente ayudados por un cambio rápido de reacciones y muy suave en su manejo.

Una vez alcanzada la velocidad de crucero deseada, la sorpresa llega por su bajo nivel sonoro, algo en lo que tiene parte de culpa unas relaciones del cambio que se han optimizado respecto al anterior modelo. En este sentido, el hecho de que el motor no trabaje a unos regímenes muy altos cuando circulamos a 120 km/h, se traduce en una rumorosidad apenas apreciable.

En consecuencia, el consumo de combustible también se ve favorecido, siendo bastante ajustado, y aunque es algo más alto que el oficial de la marca, aun así es muy  contenido, ya que durante nuestra prueba no fue mucho más allá de los 6,2 litros de media en autopista.

Lo que sí echamos en falta fueron unos caballos extra en determinadas circunstancias, como por ejemplo en aquellos escenarios en los que la carretera pica hacia arriba y vamos a plena carga, si bien basta con mantener el régimen del motor por encima de las 2.000 rpm para que esa sensación de falta de empuje desaparezca.

Ya para terminar, y en lo que respecta a su comportamiento, destacar que la Ford Grand Tourneo Connect resulta un vehículo cómodo, en el que los pasajeros se benefician de un perfecto reglaje de las suspensiones, con lo que el confort de marcha es muy alto, teniendo en cuenta además que apenas se filtran las asperezas típicas del asfalto al interior. Y todo ello con un paso por curva que, salvo por un ligero subviraje, el cual se corrige rápidamente gracias a la precisión de su dirección eléctrica, resulta muy seguro, con una gran sensación de aplomo en todo momento.   

Ficha técnica

Equipamiento (elementos principales y opciones)

Serie: ABS, Airbag conductor, airbag pasajero, bluetooht con USB, cierre centralizado con mando, controles de tracción y estabilidad, climatizador automático bizona, control de velocidad de crucero con limitador de velocidad, elevalunas eléctricos y retrovisores eléctricos, luces diurnas, ordenador de abordo, parabrisas térmico, radio CD con SYNC y pantalla de 3,5 pulgadas, sensor de lluvia con autoencendido de luces, techo panorámico, volante de cuero regulable en altura y profundidad.

Opcional (precios con impuestos): Alarma perimétrica (225 €), asientos calefactados (100 €), cámara de visión de trasera (500 €), gancho de remolque (325 €), llantas de aleación de 17 pulgadas (200€), pintura metalizada (500 €), radio-navegador con SYNC y pantalla de 5” (incluye cámara de visión traerá-1.550 €), sensores de parking (250 €), tercera fila de asientos (400 €), start&stop (365 €).

PFF (sin impuestos y sin descuentos incluidos): 19.461,63 €