En este sentido, el modelo elegido disponía tres filas de asientos en conformación 2+3+3 y un espacio adicional para la carga de cerca de 80 cm hasta el portón trasero, lo que posibilita llevar un buen número maletas o cualquier otro tipo de bultos sin el menor tipo de problemas. Pero incluso si fuera necesario, es posible retirar la tercera fila de asientos –también la segunda se puede plegar-, llegando en este caso la longitud disponible a los 1,5 metros, lo que asegura un maletero de grandes proporciones.

Todo comodidad

Bien es cierto que la unidad de pruebas era una variante de la serie más dedicada al transporte profesional, la Volkswagen Transporter, y que no llegaba a proponer los estándares de calidad que sugieren la Volkswagen Caravelle o la Volkswagen Multivan, pero aun así no podemos poner ningún “pero” a esta versión, en tanto que venía equipada con un buen número de soluciones y dispositivos que la acercaban mucho a lo que ofrecen sus cosanguíneos.

Por lo pronto, en el apartado seguridad, esta T5 se distingue por montar de serie los sistemas más importantes que podemos encontrar en este tipo de vehículos, ABS, controles de tracción (ASR) y estabilidad (ESP), sistema de arrancada en pendiente y airbags frontales, lo que le distingue de sus competidores que en la mayoría de los casos los ofrecen como elementos opcionales.

En cuanto a la dotación de confort, también es muy completa, y si bien en una gran parte hay que pagar un extra por poder disfrutar de ella, no se puede echar nada en falta, de manera que todos los ocupantes pueden disfrutar de un espacio que cuenta con todas las comodidades posibles.

Motor cumplidor

Sin embargo, en el apartado mecánico la Volkswagen Transporter no destacaba precisamente por proponer su mejor solución, en tanto que venía provisto del motor de acceso a la gama, un 102 CV que si bien resultaba muy interesante desde el punto de vista del consumo, se quedaba algo corto en cuanto a potencia pura y fuerza, sobre todo en el momento que transitábamos a plena carga, esto es, con las ocho plazas ocupadas y sus respectivos equipajes.

En cualquier caso, y a pesar de esa falta de “punch” en determinados momentos –transitar por perfiles escarpados no es su fuerte-, no podemos tener queja a la hora de llevar una cadencia más o menos alegre, siendo posible circular a 120 km/h con la aguja del cuentavueltas situada en las 2.600 vueltas –una sexta marcha le permitiría girar aún más desahogado- sin que el propulsor sufra en exceso y todo ello con una comodidad de marcha digna de elogio, propia de los modelos alemanes, y con una sonoridad percibida en el interior muy baja, lo que hace que el tránsito por cualquier tipo de perfil sea siempre el mejor posible.

En este sentido, cobra especial significación unos trenes rodantes que filtran de forma inmejorable las imperfecciones del asfalto, a la vez que fijan al vehículo sobre el asfalto perfectamente, no notándose prácticamente balanceo alguno en los pasos por curva, lo que no deja de ser una gran noticia para un vehículo del volumen de la Volkswagen Transporter, con lo que tendremos garantizados una excelente dinámica durante la conducción.

(c) fotos: Juan Caraballo

FICHA TECNICA:

Equipamiento (elementos principales y opciones)

Precio (PVP impuestos incluidos): 27.222 €

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