En un claro objetivo de mejora de la seguridad vial, el protocolo de actuación conlleva que la DGT facilite a la Dirección General de Transportes Terrestres información sobre el número de sanciones impuestas por las infracciones relativas a velocidad, alcohol y drogas, inspección técnica de vehículos y seguro obligatorio que hayan sido cometidas con vehículos cuya titularidad sea de una empresa incluida dentro del Registro de Empresas y Actividades de Transporte y que además dichos vehículos cuenten con la autorización para ejercer la actividad de transporte correspondiente.
Por su parte, la Dirección General de Transportes Terrestres facilitará a Tráfico la información del Registro de Empresas y Actividades de Transporte para obtener el número de las sanciones firmes impuestas a las empresas y vehículos.
Señalar asimismo que el acuerdo también incluye la creación de una Comisión Mixta de Seguimiento y Control, formado por personal de ambas entidades, que se encargará de examinar los resultados y resolver las dudas que se puedan presentar en la ejecución de los trabajos.