Así, los agentes de Tráfico de la Guardia Civil realizarán controles para detectar posibles defectos técnicos de los vehículos, relacionados con la seguridad de la carga que se transporte y el exceso de peso.
Igualmente, comprobarán si la documentación del vehículo y del conductor es correcta, así como el perfecto uso del cinturón de seguridad por parte de todos los ocupantes de la furgoneta y que el profesional no conduzca bajo los efectos del alcohol o las drogas.
Destacar que las ITV móviles cuentan con todo el equipamiento técnico necesario para comprobar el correcto estado del sistema de frenado, la dirección, visibilidad del conductor, equipo de iluminación y sistema eléctrico, ejes, ruedas, neumáticos y suspensión, chasis, emisiones contaminantes, etc.
Para ello cuentan con báscula de 18 toneladas por eje, frenómetro, cámara termográfica, medidor especial de faros, detector de holguras en la dirección y suspensión, cámara para inspeccionar las partes inferiores de los vehículos y analizador de gases.