Se trataba de un vehículo dirigido a los amantes del tiempo libre y la naturaleza que sobresalía por su capó más corto y su característico color beige. Además, montaba un motor OM 617 de cinco cilindros, 88 CV de potencia, capaz de hacer moverse a la Marco Polo a una velocidad máxima de 120 km/h.
Su radio de giro era de 10.9 metros, lo que garantizaba una gran maniobrabilidad a este camper incluso en las ciudades. La Marco Polo era muy confortable e incluía una cama doble en el techo, un banco trasero y asientos del piloto y copiloto giratorios, así como una pequeña cocina con lavabo, dos fuegos de gas y una nevera. Desde entonces, todas las transformaciones de la marca han venido de la mano de Westfalia.
Serie especial de la Mercedes-Benz Marco Polo
Así y todo, y con motivo del 35 aniversario de esta camper, la marca alemán ha lanzado una edición especial con el nombre de ArtVenture (su precio parte de los 44.000 euros en Alemania), con base del Clase V y un color aguamarina en el techo elevable. Especialmente confortable en su interior y con un equipamiento de primer orden, cuenta con un propulsor OM 654 con potencias hasta 239 CV y 500 Nm de par motor.