Está claro que los fabricantes de automóviles definitivamente se han decantado por reducir las emisiones contaminantes al medio ambiente y todos están desarrollado motores y combustibles alternativos al diésel, con el objetivo de conseguir un transporte más sostenible.
Pero esta solución cobra mayor protagonismo en el caso de los vehículos comerciales, teniendo en cuenta las restricciones que algunos gobiernos municipales han establecido, o lo harán a corto y medio plazo, y que impedirán a muchos de ellos (siempre los más contaminantes) acceder al centro de las ciudades. A día de hoy, los motores eléctricos o de gas natural parecen tomar ventaja entre las soluciones aportadas, aunque diversos fabricantes, entre ellos Hyundai, no descartan la pila de combustible de hidrógeno como alternativa viable en un futuro cercano, ya que representa una energía limpia y barata, si bien su desarrollo es bastante complejo.
Tal es así que Hyundai sorprendió en la pasada edición de la IAA de Hanover con un prototipo basado en el comercial H350, que incorpora esta tecnología. Cierto es que se trata solamente de un prototipo, y que en el caso de comercializarse ahora tendría un precio prohibitivo, pero sus soluciones no están lejos de ser viables en un futuro próximo. Frente a los vehículos eléctricos, que necesitan varias horas para recargarse, el depósito de 175 litros de hidrógeno puede llenarse en sólo cuatro minutos, es decir, lo mismo que si se tratara de un diésel convencional, llegando su autonomía a los 422 kilómetros.
El H350 Fuel Cell incorpora un motor eléctrico capaz de alcanzar una potencia de 136 CV. y un par máximo de 30,6 mkg, alimentándose mediante un paquete de baterías de polímero de litio de 24 kWh, consiguiendo una velocidad máxima de 150 km/h.
El hidrógeno se almacena a una presión de 700 bar, ya que cuenta con una densidad energética por volumen de 9,1 k/dm3, muy inferior a la de la gasolina (3,5 k/dm3), aunque si consideramos esta densidad frente al peso, la ventaja del hidrógeno es evidente, pues un kilo tiene la misma energía que 2,1 de gas natural y que 2,8 de gasolina.
Además, el sistema de propulsión ha sido diseñado para que no afecte a la capacidad de carga, ya que las baterías van situadas entre ambos ejes, y el hidrógeno en un depósito donde iría el de un vehículo convencional. Con ello, dependiendo de la distancia entre ejes, el H350 Fuel Cell ofrece unos volúmenes de carga entre 10,5 y 12,9 m3, igual que la versión convencional, suficiente para 5 europallets, en las versiones de carga, o para un habitáculo con 14 plazas, en las de pasajeros.
Hyundai propone esta solución para el reparto en zonas urbanas, gracias a su carencia de emisiones contaminantes, siendo además muy silenciosa. Pero también podría utilizarse en el transporte de mayor kilometraje, en virtud de una enorme autonomía.