Para llegar a estos registros en la marca del rombo han trabajado en varios puntos. Por lo pronto estrena una nueva batería (Z.E. 33 de 33 kW), la cual va asociada a un inédito motor, a lo que hay que añadir una novedosa bomba de calor, resultado de lo cual es el incremento de autonomía en 100 kilómetros en relación al Kangoo Z.E. al que sustituye.
Por lo que respecta a la mecánica, la compañía francesa ha apostado por el propulsor R60 de 60 CV de potencia de alta eficacia energética, a lo que hay que sumar la gestión electrónica optimizada de la batería, de manera que se reduce el consumo eléctrico del vehículo al circular sin que se vea afectada la potencia.
En cuanto a la bomba de calor, está vinculada al aire acondicionado, y preserva la autonomía en modo frío, limitando el uso de las resistencias eléctricas, sin duda grandes consumidores de energía.
Así, mediante el sistema de preacondicionamiento (horario de activación regulable a través de los mandos del volante), es posible precalentar el vehículo con antelación cuando está encendido, y también enfriar, siempre que se disponga de climatizador.
Señalar por otro lado, que la batería ha sido desarrollada en conjunto por Renault y LG Chem, y a modo de innovación incrementa la densidad energética gracias a la mejora química de las celdas, aumentado la capacidad de almacenamiento sin modificar sus dimensiones.