Todos ellos han pasado por nuestras manos en diversos momentos, teniendo además la suerte de poder probar un gran número de configuraciones, con unos resultados más que satisfactorios que hacen bueno el esfuerzo realizado por la marca de origen norteamericano por contar con una serie lo más completa posible que se convierta en una referencia en el mercado de los vehículos comerciales.

En el caso de la Ford Courier (dejemos a un lado su sobrenombre Transit para no dar lugar a equívocos), la serie incluye variantes furgón (que ya dimos a conocer en www.noticiasdefurgonetas.es), kombi y una tercera a modo de pequeño monovolumen  con una terminación más lujosa y un equipamiento más completo conocida como Tourneo Courier.

En esta ocasión presentamos la versión mixta configurada para transportar hasta cinco pasajeros sin el menor problema que, en caso de necesidad, es capaz de convertirse en un pequeño furgón con una capacidad de carga más que notable para tratarse de una furgoneta compacta de únicamente 4,15 metros de longitud.

Una Courier con gran habitabilidad

Uno de los aspectos más llamativos de la nueva Ford Courier tiene que ver, precisamente, con su generoso espacio en la parte posterior. Así, en el caso de llevar la segunda fila en perfecto orden de marcha, el maletero cuenta con 83,7 centímetros de fondo, por 1,34 metros de ancho (0,98 metros entre los pasos de rueda), lo que equivale a un volumen efectivo hasta el techo de 708 litros.

En caso de necesidad, podemos plegar la banqueta corrida en dos partes (2/3 – 1/3) o por entero, en cuyo caso la longitud del plano de carga llega a los 1,17 metros, o lo que es lo mismo, una capacidad volumétrica de 1.690 litros, para una carga útil máxima de 461 kilos.

Por otro lado, los pasajeros de la segunda fila cuentan con un espacio generoso para las piernas de de 92,8 centímetros, con una altura de 1,11 metros, con lo que tres adultos puede viajar cómodamente.

Por lo que respecta a la parte delantera, la comodidad también es la nota predominante, ya que el espacio para las piernas igualmente es muy amplio, concretamente 1,09 metros con el asiento en la posición más atrás y a altura media. Este hecho, sumado a la posibilidad de ajustar tanto volante como asiento de conductor en varios puntos, se traduce en una posición cara a la marcha muy conseguida.

En cuanto a la presentación del habitáculo, ya escribimos en su momento con motivo de la prueba publicada de la Ford Courier Van, que todo está perfectamente resuelto, con un salpicadero que sigue una línea continuista respecto a otros modelos de la marca, incluidos los turismos.

En este sentido, destaca la gran consola central, que cuenta con una gran cantidad de pulsadores a los que a pesar de las apariencias no es difícil habituarse. Todo ello presidido por una pantalla de 3,5 pulgadas desde la que se visualizan los señores de aparcamiento y se controla el sistema de conectividad Ford SYNC con Emergency Assistance.

Por lo que respecta al equipamiento de seguridad, resulta bastante completo en esta unidad, con airbags frontales, controles de tracción y estabilidad o asistencia para la arrancada en pendiente entre otros dispositivos. Opcionalmente, la Transit Courier Kombi da la posibilidad de montar airbags laterales, de cortina y de rodillas, además de avisadores de cinturones en la segunda fila de asientos.

Al volante de la Ford Courier

Para nuestra toma de contacto, dispusimos de una unidad con el motor diesel 1.6 TDCi de 95 CV de potencia, si bien la Ford Courier también está disponible con un segundo propulsor movido por gasóleo de 75 CV y un tercero de gasolina de un litro de cilindrada y tres cilindros (el premiado 1.0 EcoBoost) con una potencia declarada de 100 CV.

Con todo, se trata de una mecánica bastante solvente teniendo en cuenta que nos encontramos ante un vehículo comercial compacto de menos de 1.300 kilos de peso. Y es que los 215 Nm de par que entrega están siempre muy presentes, en un espectro de la banda de utilización entre 1.750 y 2.500 rpm, con lo que siempre contaremos con el suficiente empuje para acometer todo tipo de maniobras sin el menor problema.

Las relaciones del cambio manual de 5 velocidades y su perfecta simbiosis con el propulsor se traduce en una suavidad de marcha muy acusada durante todo el régimen de funcionamiento, también en el momento de acometer perfiles escarpados, cuando este turbodiésel de inyección directa muestra un gran carácter incluso por encima de las 3.000 rpm.

En ciudad, la Ford Courier se beneficia de una dirección electromecánica muy directa, que garantiza una gran maniobrabilidad (el diámetro de giro llega a los 10,5 metros entre aceras), particularidad en lo que también tiene mucho que ver el hecho de que el volante presente tan solo 2,6 vueltas entre topes.

Un dato a tener en cuenta precisamente en tráfico urbano es el consumo de combustible, que según datos oficiales apenas llega a los 4,7 litros de media (5,20 l/100 km medimos durante nuestra prueba con la variante furgón), con un gasto combinado de apenas 4 litros, cifra muy a tener en cuenta cuando se trata de ahorrar.

Por lo que respecta al comportamiento, resulta muy noble en cualquier tipo de terreno. Para ello, en Ford han configurado una suspensión, McPherson con barra estabilizadora la delantera y de muelles de doble tarado en el trasero, cuyo resultado, en términos de dinámica de conducción, es un proceder muy llevadero, sin apenas traqueteo de la carrocería. 

Ficha técnica

Equipamiento (elementos principales y opciones):

Serie: ABS, airbag conductor, airbag pasajero, cierre centralizado con mando, control de tracción y estabilidad, cuentarrevoluciones, elevalunas eléctricos, sensor de presión de neumáticos, ventanas traseras fijas, volante regulable altura y profundidad.

Opcional: Asiento conductor calefactado (270 €), alarma perimétrica (150 €), climatizador (paquete cool con bluetooth-700 €), control de velocidad de crucero con limitador de velocidad (200 €), faros antiniebla delanteros (100 €), llantas aleación 15’ (190 €), ordenador de abordo (100 €), retrovisores eléctricos termoeléctricos (60 €), sensor de lluvia/autoencendido de luces (150 €), sensor de parking trasero (180 €), sistema start & stop (300 €).

Precio sin impuestos (PFF): 9.900 €

Precios con impuestos (PVP) y sin promoción: 12.575 €