Así, el consistorio madrileño ha dado a las empresas de paquetería y logística dos años más de margen respecto al plan inicial para que puedan readaptar su flota a las restricciones de dicha zona cero de emisiones.
En cualquier caso, las empresas de paquetería se verán obligadas a renovar el 40% de su flota para acceder a estos barrios en 2020 y el 85% en 2022. Tal es así, que en la fecha inicial habría que cambiar todos los vehículos diesel adquiridos antes de 2006 y en 2022 los matriculados antes de 2014.
Qué duda cabe que para el sector de la distribución urbana el esfuerzo a realizar es considerable, habida cuenta que el periodo de amortización de un vehículo destinado a estos trabajos puede llegar, en determinados casos, hasta los 20 años.
Con todo, desde la Organización Empresarial de Logística y Transporte, UNO, se subraya que no sólo son necesarios puntos de recarga para vehículos eléctricos y de energías alternativas en Madrid, sino también en los centros logísticos desde donde parten los vehículos, así como en aquellas rutas de reparto que afectan a municipios próximos a la capital de España.