Esta caída se produce a pesar de que hace un año, las fábricas estaban todavía retomando el ritmo de producción tras el parón por la pandemia. Comparado con datos prepandemia, la caída es de un 33,8% respecto del mismo mes de 2019.
En el acumulado del año, se han fabricado 1.205.577 unidades, lo que supone un incremento del 26,1% respecto del mismo periodo en 2020 pero que, frente a un año prepandemico como es 2019, todavía registra un fuerte descenso del 21,6%.
La escasez de microchips, principal razón de la caída que se prolonga ya desde finales de 2020, está golpeando de especial manera a la producción de vehículos, tanto a escala nacional como europea.
Los centros de producción se están viendo obligados a retrasar la fabricación y a efectuar medidas especiales como la suspensión temporal de las líneas de producción hasta que la falta de semiconductores se vea resuelta. Las previsiones indican, sin embargo, que el ritmo de fabricación de estos componentes no se ajustará a la demanda del sector de automoción hasta el primer semestre de 2022.
Vehículos comerciales e industriales
Por lo que respecta a los vehículos comerciales e industriales, la caída de la producción en junio fue mucho más acusada, concretamente de un 43,1% (26.385 unidades), mientras que en el acumulado del año los números son positivos, con un incremento del 21,4% (241.449 unidades), si bien, en comparación con 2019, se redujo un 22,3%.
En cuanto a la exportación, de las fábricas españolas salieron en junio 24.308 unidades (-31,1%), con un acumulado en positivo del 41%. Por su parte, en comparación con 2019, las cifras han sido muy negativas, de un 29,5% en junio y de un 5,1% en el primer semestre.