Así, la nueva familia de los propulsores BlueHDi garantiza la disminución de las emisiones de óxidos nitrosos (NOx) hasta en un 90% y de CO2 hasta un 4% gracias a una arquitectura de la línea de escape innovadora y única, con el catalizador SCR posicionado por delante del filtro de partículas que permite tener un sistema post-tratamiento capaz de reducir dichas emisiones.
Además, y en relación con las motorizaciones de la antigua generación, el consumo de carburante ha disminuido en más de un litro cada 100 kilómetros.
Los motores, de dos litros de capacidad, entregan potencias de 110, 130 y 160 CV, y son un ejemplo en lo que se refiere al mantenimiento, que llega a los 50.000 kilómetros o 2 años.
La gama de propulsores de la Jumper queda de la siguiente manera:
- BlueHDi 110 6v (81 kW - 304 Nm a 1750 rpm): 6,0 l/100 km y 158 g/km de CO2
- BlueHDi 130 6v (96 kW - 350 Nm a 2000 rpm): 6,0 l/100 km y 158 g/km de CO2
- BlueHDi 160 6v (120 kW - 350 Nm a 2000 rpm): 6,2 l/100 km y 163 g/km de CO2