El transporte profesional cada vez requiere un mayor nivel de especialización, teniendo en cuenta los múltiples sectores de actividad existentes y las cada vez más altas exigencias de quienes dan sentido a todo proyecto de movilidad llevado a cabo por cualquier fabricante, que no son otros que los clientes.
De ahí que marcas como Opel se preocupen por desarrollar modelos prácticamente a la carta, siendo un claro ejemplo de ello la nueva Opel Movano, que llega cargada de novedades de todo tipo, si bien la más importante guarda relación con el hecho de contar dentro de la gama con versiones Tracción, en las que la fuerza del motor a las ruedas se transmite a través del eje anterior, y Propulsión, que llega por el eje posterior.
Atractiva y funcional
Ahora bien, como muchas veces la primera impresión es la que queda –no tanto en los vehículos comerciales, en los que prima más la funcionalidad-, Opel y su “socio” Renault –con la Master- han llevado a cabo un ejercicio de creatividad cuyo resultado ha sido un vehículo muy atractivo pero sobre todo con un alto grado de practicidad, que es al fin y al cabo, lo que se pide a un modelo de sus características.
Ya su diseño exterior llama poderosamente la atención, pero es cuando nos acomodamos en nuestro puesto el momento en el que advertimos las grandes mejoras que introduce con respecto a la anterior generación de la Opel Movano.
Por lo pronto, por toda la cabina se reparten innumerables huecos portaobjetos y para acoger botellas, destacando este sentido el portadocumentos escamoteable que se esconde en el salpicadero, justo por encima del equipo de sonido, y la mesa en que se transforma el respaldo del asiento izquierdo del pasajero, en la que se puede ubicar desde un pequeño ordenador hasta bebidas, vasos, etc.
Pero también nos podemos beneficiar de diversos “gadgets” y elementos de control que no hacen sino mejorar la calidad de vida abordo durante el ejercicio de nuestra actividad. No falta por ello el climatizador, el ordenador, la pantalla display que recoge diversa información de interés para el conductor, el control de velocidad de crucero, la salida para conectar dispositivos externos, el teléfono manos libres, el navegador o el sensor de aparcamiento con cámara visualizable en el parasol, si bien por muchos de ellos hay que pagar un dinero extra.
La posición al volante por su parte resulta muy ventajosa de cara a la conducción, gracias a la posibilidad de regular el asiento a nuestro gusto, que no el volante, el cual únicamente cuenta con ajuste en altura. Como quiera que el plano de visión es bastante alto y que las superficies acristaladas también son amplias, no podremos tener queja alguna en este apartado.
Tamaño medio
Para nuestra prueba teníamos entre manos una variante furgón de tracción delantera que presentaba unas medidas intermedias de 10,8m3 de volumen interno (1.610 kilos de carga útil), para una longitud de la zona de carga de 3,08 metros, una altura de 1,88 metros y una anchura de 1,75 metros –con 1,38 metros de paso de ruedas-.
También en lo que se refiere a la motorización contábamos con el motor medio de los que ha dispuesto Opel para la Movano, un turbodiésel inyección directa con una potencia declarada de 125 CV y un par máximo de 310 Nm. Asociado a este bloque e encontraba un cambio manual de seis relaciones que también acoplan los propulsores que completan la gama en el apartado mecánico, de 100 CV y 146 CV, respectivamente.
Destacar en cualquier caso que la marca alemana Opel ha dispuesto la posibilidad de incluir el grupo transmisor automatizado Easytronic, que tiene la facultad de funcionar a modo automático o secuencial.
Bien parada
Con estos condicionantes y una vez cargado nuestro furgón hasta unos 300 kilos –la colocación y la sujeción de la mercancía es magnífica, en base a una superficie de carga totalmente plana y a la presencia de una gran número de anillas de sujeción, no ponemos manos a la obra.
Y en todo momento advertimos una puesta en escena más que aceptable para lo que se tercia en este tipo de vehículos. Quede claro que no es tan radical como anuncia el fabricante, en tanto que el empuje máximo no aparece a las 1.250 vueltas, sino cuando la aguja del cuentavueltas se encuentra próxima a las 1.700 rpm, suficiente en cualquier caso para iniciar la marcha de forma segura sin preocuparnos por si nos “pisan los talones”.
El hecho de que el par máximo se manifieste hasta las 2.500 revoluciones nos permite ganar empuje y velocidad de forma rápida, particularidad que agradeceremos enormemente a la hora de incorporarnos a cualquier tipo de vía, en el momento de adelantar e incluso cuando toca recuperar en los tránsitos por carreteras escarpadas.
El cambio tiene mucho que decir en este aspecto, rápido en su proceder, aunque algo áspero en su tacto, y con unos desarrollos gracias a los cuales el motor difícilmente se va a quedar sin fuerza. Además, también permite al vehículo transitar de forma desahogada a altas velocidades, culpa de lo cual la tiene una sexta marcha superdirecta que mantendrá siempre al propulsor en el régimen de mayor rendimiento.
Sin sobresaltos
Llegados a este punto, nos detenemos en uno de los aspectos en los que más ha evolucionado la nueva Opel Movano 2.3 CDTi Tracción, que no es otro que en la adopción de unos trenes rodantes especialmente configurados para cada tipo de misión.
En el caso de la unidad de pruebas (Tracción), la diferencia con las versiones Propulsión radica en el reglaje de la suspensión trasera, de ballestas de hoja simple en el primer caso, y de hoja doble o triple –dependiendo de si calza rudas simples o gemeladas- en el segundo.
El resultado es un comportamiento noble en líneas generales, si bien, en determinadas circunstancias –las curvas cerradas son una de ellas-, se advierte cierta tendencia del eje trasero a perder la trazada, en un desplazamiento lateral que, sin embargo, no resulta tan determinante como para preocuparnos en exceso.
Más firme resulta el tren anterior, que en todo momento “manda” sobre el resto de la carrocería, de manera que atempera ese carácter un tanto nervioso de la zaga. Ya en carreteras de alta capacidad este pequeño “pero” desaparece por completo y el devenir es muy confortable, virtud que podemos hacer extensible al tráfico urbano, por donde se desenvuelve a la mil maravillas gracias a un radio de giro muy interesante y a una dirección realmente fiable.
Ficha Tecnica
MOTOR |
2.3 CDTi |
Tipo |
Inyección directa common rail |
Cilindrada (cm3) |
2.298 |
Nº cilindros |
4 en línea |
Válvulas por cilindro |
4 |
Diámetro x carrera (mm) |
85 x 101,3 |
Relación de compresión |
16:1 |
Potencia (CV/kW) |
92/125 |
a un rég. giro (rpm) |
3.500 |
Par máximo (Nm) |
310 |
a un rég. giro (rpm) |
1.250-2.500 |
TRANSMISION |
|
Cambio |
Manual 6 velocidades más marcha atrás |
Embrague |
Monodisco en seco |
Accionamiento |
Hidráulico |
Tracción |
Delantera |
DIRECCIÓN |
|
Tipo |
De piñón y cremallera |
Accionamiento |
Hidráulico |
(c) fotos: Juan Caraballo
{jcomments on}