Durante estos días se establecerán puntos de control en las carreteras, sobre todo en las convencionales, que son las que mayor índice de siniestralidad registran y en zonas próximas a centros comerciales, polígonos industriales y lugares de carga y descarga. Los controles también se realizarán durante la noche.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico, así como el resto de policías autonómicos y locales que se sumen a la campaña, controlarán, entre otros, los siguientes aspectos relacionados con la seguridad vial: velocidad a la que circulan, exceso de peso, defectos técnicos del vehículo, el buen estado de los neumáticos, seguridad de la carga transportada, documentación del vehículo y conductor, uso del cinturón de seguridad por parte del conductor y de los ocupantes, conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas, utilización del teléfono móvil, etc.
Y es que preocupa especialmente el alto índice de siniestralidad en furgonetas. En 2017 las furgonetas estuvieron implicadas en 11.150 accidentes con víctimas en los que fallecieron 243 personas, lo que supone el 11% del total de accidentes con víctimas y el 13% del total de fallecidos en 2017. De los fallecidos, 90 eran ocupantes de las furgonetas y 153 eran personas que viajaban en otros vehículos.