Tal es así, que la alcaldesa Manuela Carmena ha decidido abrir una franja horaria desde las 23:00 horas hasta las 7:00 de la mañana de cara a realizar este tipo de operaciones, para lo cual los interesados tendrán que pedir un permiso especial que tendrá validez por un año.
Además, el Ayuntamiento de Madrid ha comunicado a los representantes del transporte y la logística que concederá un permiso extraordinario de acceso a ‘Madrid Central’ a vehículos industriales de abastecimiento a comercios de alimentación de mercados, galerías de alimentación y otros establecimientos de venta directa al por menor de carnes, pescados, frutas y de distribución de pan común, repostería artesanal y churrería.
También se concederá a los vehículos industriales propiedad de trabajadores empleados por cuenta ajena por las empresas de distribución que se acojan a un convenio colectivo que exprese que el trabajador aportará su propio vehículo para la realización de la distribución de mercancías.
A pesar de ello, CETM-Madrid, la asociación que representa a empresas del sector del transporte de mercancías por carretera de la Comunidad de Madrid, ha mostrado su repulsa más absoluta al informarse por los medios de comunicación que el Ayuntamiento de Madrid permite la distribución nocturna de mercancías en Madrid Central, una de las propuestas presentadas desde el inicio de la presentación del plan por el Comité Madrileño del Transporte por Carretera, máximo órgano de representación del sector en la Comunidad madrileña y al que pertenece esta asociación.
Además, no se puede pasar por alto la deslealtad institucional y el protagonismo enfermizo e injustificado con la que ha actuado la asociación UNO, que también es miembro del Comité Madrileño del Transporte por Carretera, y en la que el Ayuntamiento de Madrid parece haber visto un provechoso aliado para no cumplir con los compromisos adquiridos con el sector del transporte consistentes en flexibilizar el calendario de renovación de flotas.
Los vehículos que acceden a 'Madrid Central' no son de los operadores logísticos, sino de las empresas de transporte, pymes y autónomos principalmente, que dichos operadores contratan, por lo que UNO, con este acuerdo con el Ayuntamiento, contribuye de manera considerable a la precariedad de la actividad de la distribución urbana, fomentando que trabajadores realicen la actividad de distribución en sus vehículos particulares, en contra de lo que hace unos pocos meses defendían cuando eran las plataformas de comercio electrónico las que acudían a estas prácticas que tanto daño hacen a la competencia y profesionalización de este sector.
Al mismo tiempo, CETM-Madrid sigue reclamando un pronunciamiento por parte del Ayuntamiento de Madrid en relación con la ampliación del calendario de renovación de flotas en ‘Madrid Central’, para lo que hay que clarificar con criterios objetivos, realistas y asumibles el futuro de la movilidad y el transporte de mercancías, con garantías de que el proceso de renovación de las flotas mantendrá su operatividad, durante el periodo de amortización de los vehículos industriales.