Así, el primer vehículo de esta nueva ‘sociedad’ será la aparición en 2021 de un nuevo comercial urbano desarrollado y construido por Volkswagen Vehículos Comerciales, basado en el nuevo Caddy, al que seguirá una furgoneta de una tonelada de carga desarrollada por Ford.
Pick-up y eléctricos
Ya para 2022 está previsto que se lance un pick-up medio sobre la plataforma del Ford Ranger, que será comercializado en la gama Amarok de Volkswagen.
Un año más tarde, la marca del óvalo empezará a fabricar un vehículo eléctrico basado en la plataforma Modular Electric Drive de Volkswagen, el cual se producirá en la planta de Colonia-Merkenich, del que Ford espera poder comercializar hasta 600.000 unidades.
Las dos compañías confían el alcanzar con estos modelos una producción de global de ocho millones de unidades durante el ciclo de vida de los productos.
Independientemente, Ford incluirá versiones eléctricas durante los próximos 24 meses en sus gamas Transit y del pick-up americano F-150 para aquellos clientes que necesiten cero emisiones en su actividad.
Conducción autónoma
Por otro lado, las dos marcas trabajarán con Argo AI, empresa norteamericana especializada en conducción autónoma, con la que Volkswagen firmó un acuerdo recientemente, mientras que Ford ya tenía intereses de propiedad y desarrollo.
El acuerdo va dirigido a reducir los costes de desarrollo y a mejorar las posiciones de ambas compañías, pero no implica el intercambio de acciones entre ambas y seguirán compitiendo independientemente en los mercados.