Especial relevancia tuvo el capítulo del IVA en la adquisición de vehículos, que se incrementó un 22,3% respecto al ejercicio anterior, alcanzado los 3.526 millones de €. En relación al uso del vehículo, destaca el consumo de carburante, una partida que aporta 18.716 millones de € a las Arcas Públicas.
Como consecuencia del incremento de las exportaciones y del valor añadido de los propios vehículos exportados, así como un aumento significativo del mercado interior, la facturación del conjunto de marcas de vehículos que operan en España ascendió el pasado ejercicio a 60.855 millones de €, un 18,3% más que en 2014. Si a esta cifra, se suma la facturación del sector de componentes (32.000 millones de €), el resultado es que la facturación conjunta de vehículos y piezas suma 92.000 millones de €.
Con todo, la industria de automoción continúa incrementando su participación en el PIB español, hasta el punto de que la fabricación de vehículos y componentes representa ya un 8,7% del PIB español, es decir, nueve décimas más que en el ejercicio anterior. Si a ello le sumamos las actividades de comercialización, postventa, servicios financieros, seguros, etc., la participación del automóvil en el PIB español se eleva hasta el 10%.
Por su parte, el empleo en las factorías y también en las concesiones continúa al alza. El sector del automóvil representa ya un 9% de la población activa, tres décimas más que en 2014. El empleo en fábrica muestra una altísima calidad y estabilidad, si bien, el 83% de los contratos en factorías siguen siendo indefinidos.
Por otro lado, las exportaciones de vehículos continúan siendo un renglón elemental del impulso del sector, en tanto que representan el 18% del total en nuestro país, siete décimas más que en ejercicio anterior.
Señalar, por último, que el automóvil es el sector que mejor balance comercial presentó en el año 2015. Se alcanzó un superávit comercial de 17.196 millones de €.