Y es que si el desarrollo de los filtros de habitáculo se venía ya enfocando en desarrollar medios filtrantes más eficaces para retener gases ácidos (NO2, SO2, H2S), relacionados con enfermedades pulmonares y cardiovasculares; compuestos orgánicos volátiles (VOC), que irritan las mucosas; así como amoniaco, que puede transformarse en compuestos nitrogenados muy perjudiciales para la salud. Ahora los esfuerzos se centran también desarrollar medidas de filtración que eviten la propagación del coronavirus.
De este modo, el desarrollo de los filtros de habitáculo se dirige a tratar de filtrar las partículas más ínfimas y, a la vez, las más peligrosas para la salud, pues las mucosas del organismo no siempre son capaces de retenerlas.
En este sentido, desde ‘Elige calidad, elige confianza’ (ECEC) señalan que el uso del filtro de alta eficiencia o filtros High Efficiency Particulate Air (HEPA) como filtro de habitáculo sería el más efectivo, ya que, de hecho, este tipo de filtros son los empleados en quirófanos, por ejemplo.
Y es que los filtros HEPA son considerados clase H13, de acuerdo con las normas EN1822 e ISO29463. Esta clase de filtros también tienen aplicación, como indicábamos, en quirófanos, así como en la industria farmacéutica, como medio para filtrar gérmenes, virus y contaminación microbiológica del aire, dado que, los filtros H13 tienen una eficiencia de, al menos, el 99.95%.
Al servicio de la fabricación de material sanitario
En el presente contexto de emergencia sanitaria por la propagación del coronavirus, algunos fabricantes de componentes relativos a la filtración de partículas para la automoción han puesto sus medios y experiencia al servicio del ámbito médico y sanitario.
Algunos ejemplos de estas actuaciones son la producción y suministro de medios filtrantes para mascarillas o el suministro de filtros HEPA necesarios en la instalación de salas de aislamiento de emergencia o para la fabricación de respiradores.
Asimismo, algunas divisiones de los grupos de fabricación de componentes de filtración para automoción, especializadas en membranas y módulos, también centran sus esfuerzos en contribuir a disminuir la propagación del virus, dado que su tecnología desempeña un papel determinante en varias funciones críticas en el actual contexto, incluida la producción de medicamentos o vacunas.