Para la entidad, aunque el desarrollo de los vehículos impulsados por nuevas tecnologías ha experimentado notables avances en España en los últimos diez años, estamos todavía lejos de otros países de nuestro entorno y de un avance que impulse el desarrollo real del vehículo eléctrico.
En 2011, los vehículos eléctricos representaban el 0,05% del mercado, mientras que en 2020 el porcentaje se ha elevado hasta 4,8%, un crecimiento notorio pero insuficiente al representar tan sólo el 0,2% del actual parque automovilístico.
Las 16 medidas
- Fijar objetivos vinculantes de despliegue de infraestructura de recarga de acceso público.
- Reconocimiento de interés estratégico nacional para proyectos de despliegue de infraestructuras de recarga pública de alta potencia (+250 kW).
- Actuaciones para incrementar el número de puntos de recarga de acceso público interurbana a corto plazo.
- Desarrollo complementario o adicional a la declaración de utilidad pública (+250 kW).
- Incentivar el despliegue en autopistas y autovías de la Red General de Carreteras del Estado.
- Transparencia de la capacidad de consumo de la red de distribución.
- Marco regulatorio local claro y simplificado.
- Promover infraestructuras de recarga inteligente de los vehículos eléctricos en los aparcamientos de los edificios.
- Ayudas a la implantación de la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos.
- Beneficios fiscales de carácter temporal en el Impuesto Especial sobre Electricidad.
- Flexibilización temporal de los costes fijos en puntos de recarga pública.
- Inclusión de proyectos de potenciamiento de la infraestructura de recarga en los planes de inversión anuales y plurianuales de las distribuidoras eléctricas.
- Registro de puntos de recarga de acceso público.
- Facilidades para el pago en los puntos de recarga de acceso público (interoperabilidad).
- Transparencia de costes en la factura para evitar riesgos de arbitraje de precios.
- Mantenimiento de los puntos de recarga pública y aseguramiento de la operación.