De tal forma, los riesgos al volante son mayores que durante el día, de ahí que tengamos que aumentar las precauciones mientras conducimos de cara a incrementar la seguridad vial.

Es por ello que la plataforma internacional AutoScout24 ofrece una serie de consejos para llevar una mejor conducción durante la noche:

• Incrementar la distancia de seguridad: con la falta de luz, la percepción de los objetos se reduce por lo que la distancia de seguridad respecto al vehículo que nos precede debe ser mayor. En este sentido, lo ideal es dejar más de tres segundos en relación al mismo, de manera que nos dé tiempo a frenar en caso de que el coche de delante se detenga bruscamente.
• Cuidar la vista: para los ojos es completamente diferente conducir de noche que de día. Es por ello que si detectamos pérdida de visión cuando no hay luz, debemos visitar al oftalmólogo. Si se utilizan gafas graduadas es muy importante mantener los cristales limpios, una obviedad que no todo el mundo cumple.
• Correcta utilización de las luces: tener claro cuándo hay que utilizar las luces cortas y largas es fundamental, pues de no hacerlo que una forma correcta podemos perjudicar a los demás conductores. En carreteras secundarias es conveniente utilizar las largas, si bien en el momento en que vayamos a adelantar hay que cambiar a las luces de cruce para evitar deslumbramientos. Igual de importante es regular las luces a la altura correcta.
• A oscuras en el interior: de noche hay que conducir sin luces en el habitáculo. Y es que si llevamos el interior iluminado se reduce la visión exterior, en tanto que nuestros ojos se acostumbran a un grado de luz diferente del que hay fuera, de manera que la distancia de visión disminuye.

Hacer más paradas: circular de noche durante muchas horas (por ejemplo, los servicios de paquetería) suele resultar un tanto monótono y puede dar lugar a somnolencia o pérdida de concentración al volante. Para evitarlo en lo más posible es conveniente hacer más paradas para tomarse un café u otra bebida estimulante. Tampoco es descartable echar una cabezada de 20 minutos aproximadamente, lo que evitaría que se nos cierren los ojos durante la marcha.